Cada vez que tengo ocasión de poner el pie en un Auditorio de las características como el Palau de Valencia o el auditorio de Castellón , como Director, me propongo un programa basado mayoritariamente en música original para Banda y sobre todo de compositores valencianos. Personalmente, creo que he cumplido en los últimos 5 años con mi "obligación" de difundir la música original de Banda con aquellos autores de nuestra Comunidad, algunos de ellos consagrados compositores y otros noveles. Efectivamente debe ser así. Si queremos potenciar la producción de calidad en este género, las bandas debemos interpretar esta música, lo cual no significa ni garantiza ni su aceptación popular ni su perdurabilidad en el tiempo.
Ahora bien, cuando en Jurados internacionales de concursos y certámenes se tiene que juzgar obras originales de Banda frente a "ligeras" interpretaciones de transcripciones de grandes compositores como Bartok, Stravinsky, Mahler o Prokofiev, personalmente no quisiera estar en su lugar, pues creo es una pena y además una injusticia comparar a ambos grupos de compositores en un concurso como si fuese lo mismo, pues evidentemente salen perdiendo los primeros, o mejor dicho, salimos perdiendo todos. Sería como en un concurso de pintura, presentar una copia mas o menos parecida de un Velázquez contra un desconocido pintor, que aunque rico en color y proporción, nunca podrá compararse con aquél (siempre que ambos estén impecables, claro está).
Recuerdo cuando siendo niño y clarinete 3º de la Artística de Buñol, que tras esos insufribles e interminables ensayos para un Certamen en los que se ejecutaba, (y nunca mejor dicho) a Respighi, Tchaikowsky o Bruckner pensaba: ...¡Qué ganas tengo de que llegue el día en que las Bandas toquen sólo música compuesta para Banda! .....y por cierto, de que de una "puñetera" vez los clarinetes dejen de hacer esos trémolos y tesituras imposibles, para emular lo que nunca será posible: el sonido de la orquesta sinfónica y lo peor de todo, las impotentes ganas, quizás de un frustrado Director. Mientras tanto, los que pensamos que la orquesta de viento es una realidad musical con aceptable presente pero más prometedor futuro, seguiremos fraguando y motivando con nuestras interpretaciones el necesario acicate en la creación de cada vez más compositores de este género.